Las migrañas causan un dolor tan real como el de las lesiones, con una diferencia: a veces, los hábitos saludables y los remedios simples, no médicos, pueden detener las migrañas antes de que comiencen. Los medicamentos son una forma comprobada de tratar y prevenir las migrañas. Pero los medicamentos son solo una parte de la cuestión. También es importante cuidarte bien y entender cómo sobrellevar el dolor de la migraña cuando te ataca.
Las mismas elecciones de estilo de vida que promueven una buena salud general también pueden reducir la frecuencia y gravedad de la migraña. Combinar los medicamentos con medidas conductuales y el estilo de vida a menudo es la manera más eficaz de tratar la migraña.
Busca un entorno tranquilo
Ante el primer signo de migraña, tómate un descanso y deja de hacer lo que estés haciendo, siempre que sea posible.
Sin embargo, debes tener cuidado. Si bebes demasiada cafeína con demasiada frecuencia, con el tiempo podrías tener dolor de cabeza por la abstinencia. Y si tomas cafeína muy tarde, podría alterarte el sueño, lo que a su vez puede afectar las migrañas.
Duerme bien
Las migrañas pueden impedirte conciliar el sueño o despertarte por la noche. Asimismo, las migrañas a menudo se desencadenan por haber dormido mal.
Estos son algunos consejos que te ayudarán a dormir mejor.
Presta atención a lo que comes y bebes antes de irte a dormir. El ejercicio intenso, las comidas pesadas, la cafeína, la nicotina y el alcohol pueden interferir en el sueño.
Aliméntate con prudencia
Tus hábitos alimentarios pueden influir en tus migrañas. Considera los conceptos básicos:
Haz ejercicio regularmente
Durante la actividad física, el organismo libera ciertas sustancias químicas que bloquean las señales de dolor que van hacia el cerebro. Estas sustancias químicas, además, contribuyen a aliviar la ansiedad y la depresión, dos trastornos que pueden empeorar la migraña.
La obesidad también aumenta el riesgo de dolor de cabeza crónico. Mantener un peso saludable a través del ejercicio y la alimentación puede aportarte beneficios adicionales a la hora de tratar las migrañas.
Si tu médico está de acuerdo, elige cualquier ejercicio que disfrutes. Caminar, nadar o andar en bicicleta suelen ser buenas alternativas. Solo recuerda de comenzar a ejercitarte progresivamente, ya que el ejercicio vigoroso puede desencadenar una migraña.
Controla el estrés
El estrés y las migrañas a menudo van de la mano. No puedes evitar el estrés diario, pero puedes mantenerlo bajo control para ayudarte a controlar las migrañas:
Lleva un registro de las migrañas
Un diario puede ayudarte a determinar qué es lo que te desencadena las migrañas. Anota cuándo comienzan las migrañas, qué estás haciendo en ese momento, cuánto duran y qué, si es el caso, proporciona alivio.
Hasta hace poco, se consideraba que el mejor consejo era evitar los desencadenantes de la migraña. Pero una nueva investigación sugiere que esto puede aumentar la sensibilidad a los posibles desencadenantes.
Un enfoque más útil puede ser exponerse progresivamente a los desencadenantes y aprender a lidiar con estos desencadenantes del dolor de cabeza mediante el uso de técnicas de manejo del comportamiento. Estos pueden incluir identificar y desafiar pensamientos negativos, entrenamiento en relajación y reducción del estrés. Se necesita más investigación para comprender si este enfoque es más eficaz para controlar las migrañas y de qué manera lo es.
Procura un equilibrio
Vivir con migrañas es un desafío diario. Tener un estilo de vida saludable puede ayudar. Pídeles a tus amigos y seres queridos su apoyo. Si estás ansioso o deprimido, considera unirte a un grupo de apoyo o busca asesoramiento psicológico. Confía en tu habilidad para controlar el dolor.