El Halcón 1 (H1), que en diciembre pasado se convirtió en el primer prototipo de avión comercial que se construye en México después de 77 años, ahora será fabricado como una aeronave certificada, lo que podría reactivar la economía de la ciudad mexicana de San Miguel de Allende, en Guanajuato (centro del país).

Sin embargo, el Halcón 1 fue fabricado en el estado de Querétaro (centro del país) por la empresa mexicana Horizontec, incubada en el Centro Nacional de Tecnologías Aeronáuticas (Centa), inaugurado en enero de 2018 por el entonces presidente, Enrique Peña Nieto, con una inversión de 100 millones de pesos (5 millones 213 mil 800 dólares) de recursos federales y 25 millones (1 millón 303 mil 450 de dólares) en equipamiento del Gobierno del estado.

Horizontec es una 'startup' del sector aeroespacial mexicano, fundada por Giovanni Angelucci, quien inició la empresa en 2013 con la idea de crear un prototipo de avión deportivo hecho de fibra de carbono. "Inicié como aprendiz, hace 10 años, en un taller de fabricación de aviones ultraligeros en Italia.

Posteriormente, durante los siguientes siete años, me involucré en el diseño y la construcción de aeronaves", escribió él mismo en un blog publicado en la página del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), un organismo público creado para fomentar a las micro, pequeñas y medianas empresas.

Fue así como el H1 se convirtió en la primera aeronave fabricada en Querétaro con madera compuesta con fibra de vidrio y resinas epóxicas. Tiene capacidad para dos pasajeros, una longitud de 6,1 metros y una altura de 2,3 metros, y utiliza gasolina común para su funcionamiento, en vez de turbosina.

Deportivo ligero

"Es un avión deportivo ligero (LSA, por sus siglas en inglés), una categoría nueva que surgió en Estados Unidos hace unos 10 años conocida en todos los continentes", explicó Angelucci a la agencia de noticias del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), un organismo público descentralizado del Gobierno federal mexicano dedicado a promover y estimular el desarrollo de la ciencia y la tecnología.

La construcción del Halcón 1 comenzó a fraguarse desde 2013, cuando Angelucci Carrasco inició la fabricación desde un pequeño taller en Ciudad de México con la contribución de dos ebanistas para moldear la aeronave y pruebas diversas sobre los sistemas de combustible, frenos y aviónica.

De Ciudad de México a Querétaro

Giovanni Angelucci Carrasco llegó a México en 2013. En ese entonces comenzó con la fabricación de su propio modelo de avión ligero, deportivo, de madera, con el objetivo de usarlo personalmente, escribe. "En el proceso de este primer prototipo 100% mexicano, la comunidad aeronáutica mostró interés debido a la calidad del avión y me convencieron de producir de forma comercial modelos deportivos de fibra de carbono."

El sector aeronáutico se ha convertido en una de las apuestas fuertes del estado de Querétaro, que aparece dentro de los 10 destinos en el mundo más importantes para dicha industria, con base en el ranking mundial 'Ciudades Aeroespaciales del Futuro 2018/19', elaborado por fDi Intelligence, un servicio del Financial Times.

Fue así que comenzó la incubación del proyecto en la Universidad Aeronáutica en Querétaro (Unaq), para luego trabajar en conjunto con el Centa y el Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (CIDESI). Además, se han sumado investigadores de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica del Instituto Politécnico Nacional.

Hasta ahora, Horizontec también ha sido apoyada por el Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Querétaro (Concyteq), el Aeroclúster de Querétaro, Conacyt y la Secretaría de Economía.

El futuro del Halcón

El 16 de octubre del año pasado, el H1 alcanzó los 50 ciclos de vuelo que exigen las autoridades "para pasar de ser un prototipo experimental a una aeronave certificada", detalló el piloto aviador Manuel Rivero Lascuráin, quien el 1 de septiembre de 2018 realizó el primer vuelo de prueba de la aeronave.

De esta forma, la aeronave comenzará a ser construida en su totalidad en el estado de Guanajuato, pues la planta de fabricación IK Aerospace Group será instalada en el poblado de San Miguel de Allende, donde se prevé que inicie operaciones en los primeros meses de este año. La meta es ensamblar 30 aviones al año.

La fabricación del H1 incluso fue destacada por el gobernador del estado de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien indicó que la instalación de la fábrica generará 250 empleos directos durante los próximos cinco años.

El Halcón 1 es el precursor de un segundo avión: el Halcón 2 que, a diferencia de primero no será de madera y se prevé que sea más ligero.

Con información Agencia RT

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